Anonadado,
cuando sentí el tacto de tu piel
fueron dos segundos,
pero suficiente para olvidar mi hora del café
cuando sentí el tacto de tu piel
fueron dos segundos,
pero suficiente para olvidar mi hora del café
Impacientado
porque no encontraba lápices y papel
porque no encontraba lápices y papel
Para dibujar tu anatomía
Y esa sonrisa que te salió sin querer
Exhauso
Termine mi retrato y lo colgué
Será una garantía
De que nuestros momentos juntos
Nunca los olvidare
Me vendrá bien en invierno
En tu ausencia, sin tus besos
En la distancia, sin tu suave peso
En mi regazo, rememorando todo eso
Añadiendo la nostalgia de tus caricias
En mi pelo, sin ponerte ningún pero
Sintiendo que mi alma se eriza
Sobreviviendo así hasta el verano
Llegando así nuestros intensos días